25.11.23

VeLLo PuBiCo











 

ReLaTo. YAN. 2ª parte



 Un rato después.


  • ¿Qué tal?.- le pregunto a Yan mientras él juega con uno de mis pezones.

  • Muy bien. Me gusto como me follaste.

  • No fui muy...

  • Para nada.

  • Yo no aguanto tan rápido, siento como si me partieran en dos el culo.

  • Falta de práctica, ja, ja, ja.

  • Supongo.

  • Si me dejas yo te lo haré, pero quiero hacértelo como te guste.

  • Gracias.

  • A ti por hacérmelo como quería.


Nos besamos.


  • Tenemos de nuevo la polla dura.- me dice Yan sonriendo.

  • Tengo 45 minutos.

  • Tiempo de sobra.


Baja por mi cuerpo hasta meterse de lleno mi polla en la boca. Me la come lo que me parece un microsegundo y levantándome las piernas siento la lengua en mi ano. Saca la cara y me dice:


  • Increíble.- me dice relamiéndose.

  • No hay mucho pelo.

  • No me molesta.


Le sonrió y vuelve a meter la cabeza de lleno.


Como le tenía yo hace un rato a él me tiene el ahora. Me agarro de las piernas y siento como su polla entra en mí. No le cuesta nada metérmela, dilato mucho y normalmente no me duele, a no ser que sea un pollón de 24 centímetros claro.


Su follada es suave y rítmica. No deja que perdamos contacto visual mientras su lengua recorre mis pies y parte de mis piernas. Su mano agarra mi pene como si fuera de cristal y me lo masturba con cariño.


Su boca sonrosada se come mi pie mientras me masturbo y no aguanto más la presión testicular. Me corro y él sonríe. Acelera un poco y viniendo hacia mí me besa mientras se corre y convulsiona contra mi cuerpo.


Nos damos una ducha y me visto.


  • Ha sido una pasada.- le digo poniéndome los slip.

  • Una verdadera pasada.- me dice mientras me besa en un hombro.

  • ¿Te volveré a ver?

  • Yo deseo que sí.

  • Hablamos mañana y vemos.


Se pone delante de mí y sujetándome de la barbilla me sube la cara y me besa. Suelto los pantalones y los dejo caer.


  • No suelo decir esto, pero contigo ha sido increíble en todo momento. Gracias y que sepas que me tienes para lo que necesites no solo para follar.


Me emociono y le beso con fuerza. Nos abrazamos.


  • Yan yo... tengo pareja.

  • Me lo imaginaba.

  • ¿Por qué?

  • Por qué alguien como tú se merece una pareja que la ame.


Lloro en su hombro.


  • ¿Os amáis?

  • Mucho.

  • ¿Y esto le parecerá bien?

  • Normalmente, follo con otros una vez y poco más, esto es...

  • ¿Diferente?

  • Si bastante diferente.

  • No quiero causar problemas.

  • No lo harás.


Busco su boca y nos besamos. De nuevo siento su calidez y su olor tan embriagador. Siento mi polla

como me aprieta en los slip.


  • Venga, vete por qué si no te voy a volver a comer.- me dice Yan separándose de mi desnudo y medio empalmado.

  • Que estés tan bueno y desnudo no ayuda.

  • Si quieres me visto.

  • No por favor, no te vistas nunca.


Se ríe y me vuelvo loco de amor.


“MIERDA Y MÁS MIERDA”


Varios días después.


Los días pasan y yo no encuentro el momento de hablar con Luis. Todos los días hablo con Yan y me muero de ganas de volver a verlo. Por fin es viernes y sentados en el sofá mi novio y yo le saco el tema.


  • Luis, ¿qué tal?

  • Bien amor, un poco cansado, pero bien.

  • Tenía que preguntarte algo.

  • Suéltalo.

  • Recuerdas cuando acordamos abrir la pareja y las normas que pusimos.

  • Lo recuerdo.

  • Pues quiero cambiar una.

  • ¿Cuál?

  • La de ver a alguien más de una vez.

  • Uhmmm, ¿te gusta?

  • Sí.

  • ¿Como para enamorarte y querer algo más?

  • No creo.

  • Por una parte, me da miedo, pero por otra te entiendo.

  • ¿A si?

  • Sí, alguna vez he querido ver a alguien alguna vez más y no lo hice por respeto a ti.

  • Gracias.

  • Y ahora agradezco que me lo consultes y que lo hablemos.

  • Luis, yo te quiero a ti lo sabes.

  • Lo sé.

  • Y lo que siento por Yan es totalmente diferente.

  • ¿Yan?

  • Si es asiático.

  • ¿Está bueno?

  • Mucho, ¿quieres verlo?


Me hace un gesto afirmativo y sacando el móvil le enseño una foto de torso y cara.


  • Vaya...

  • Además de sexy, es muy agradable y respetuoso.

  • ¿Un trío?

  • Ja, ja, ja, con el tiempo se lo podría proponer.

  • Sal con él.

  • ¿En serio?

  • Sí, solo por como hablas de él se nota que te gusta y ante todo lo que quiero es tu felicidad.


Salto sobre él y le como a besos.


  • También yo puedo ver a alguien más veces.

  • Por supuesto.


Me quito la camiseta y él se lanza a mis pezones. Me mordisquea uno y después el otro. Me levanto y me desnudo mientras Luis hace lo mismo. Me pongo de rodillas en el suelo y acercándome su polla a la boca, me la meto entera.


  • Joder Rafa... Ahhhh...


Estoy muy cachondo y no solo por la idea de poder ver más a Yan sino de que mi relación con Luis sea tan madura y de poder hablarlo con total naturalidad.


Tengo su polla en la mano y la tiene dura como un mástil. Me subo encima y colocándola en mi esfínter me siento sobre ella.


  • Eres muy bruto... Ahhhh...

  • Ya sabes que sí... Uhmmm... joder...


Mi culo ya está más que echo a su polla. Me tiro a su boca mientras le dejo que me embista con fuerza.


Sin tocarme ni nada me corro en su vientre y grito de felicidad. Luis me tapa la boca riéndose alocadamente mientras me embiste con más y más fuerza hasta que le llega el orgasmo y me rellena el culo con su lefa.


Nos besamos y me quedo en su cuello encajado. Se lo beso. Siento sus manos acariciándome la espalda.


  • Gracias.- le digo sofocado.

  • ¿Por el polvo?, ja, ja, ja.

  • Ya sabes por qué bobo.

  • De nada.

  • Me encanta follar contigo.

  • Y a mí contigo.


Nos besamos y nos quedamos mirándonos a los ojos.


  • ¡Ducha¡.- decimos al unísono!


Tras la ducha y vestirnos nos vamos de cerveceo con algunos amigos.


Son sobre las once de la noche cuando miro el móvil, un mensaje de Yan.


. Tengo ganas de verte ;) Foto sexy en la cama.

. Y yo a ti. ¿Mismo hotel y habitación?

. Sí. Icono de palmitas.


  • Amor me voy.- le digo acercándome a Luis.

  • ¿Todo bien?

  • Si sí.

  • Pásalo bien.

  • Gracias.

  • Te quiero.

  • Y yo a ti.


Me despido de mis amigos y me voy pitando al hotel.


En media hora estoy allí. Durante el camino no he dejado de hablar con Yan y él no paraba de mandarme fotos sugerentes. La última de sus pies, la polla, me babea.




PeCtOrAlEs