12.8.23

Relato. Mi MeS dE vAcAcIoNeS 6ª parte

 


DÍA 7


La mañana se nos pasa entre besos y muchas caricias, incluso anales.


Tras comer nos arreglamos y vamos a por Jorge. Puntual está en la puerta esperándonos.


  • ¿Llevas mucho esperando?

  • Nada.

  • Sube.

  • Gracias.

  • Héctor, Jorge, Jorge, Héctor.


Se dan los respectivos besos y arrancamos. Llegamos a la playa y tras dejar las cosas nos desnudamos y nos metemos en el agua. Salimos y entre risas me viene a la cabeza.


  • Oye Héctor, ¿fue en esta playa donde te conocí?

  • Cierto.

  • Ja, ja, ja.

  • ¿Qué paso?.- pregunta Jorge.

  • Estaba yo dándole a un tipo por el culo cuando apareció con su preciosa polla empalmada hacia nosotros, se unió y bueno, al final terminamos en mi casa.

  • Uhmmm buen encuentro.

  • La verdad que sí.


Héctor me mira y sonríe tímido.


  • Ahora no te me hagas la tímida, ja, ja, ja.

  • Ja, ja, ja calla... ¿Y vosotros?

  • Una noche en la piscina, llegue y estaba Ricardo en pelotas dentro nadando. Hasta que entre yo y me desnude y nada también terminamos en su casa.

  • Vaya... menuda semana llevas...

  • Ja, ja, ja, la verdad que no me puedo quejar y ahora os tengo a los dos juntos, que más puedo pedir.

  • Qué bonito eres.- me dice Héctor. ¿Os apetece ir a una calita que está aquí cerca nadando?

  • Claro.- contestan al unísono.


Nos adentramos en el mar y vamos siguiendo a Héctor. Llega hasta una calita minúscula con algo de arena y tras salir se queda de pie mirándonos llegar y manoseándose la polla.


Primero sale Jorge y acercándose a él le besa. Solo de morbo que me da verlos, así me empalmo antes de salir del agua. Jorge se agacha y se mete la polla aún flácida de Héctor, que en cuestión de segundos está como un roble. Yo me acerco y tras comerle la boca a Héctor me masturbo viendo la escena.


  • Un segundo.- le pide Héctor a Jorge.


Se sienta sobre la arena y Jorge se baja a comerle la polla y Héctor me agarra la mía y me la mama.


Estamos en la puta gloria y además fuera de miradas ajenas, solo somos los tres. Mi polla está a punto de sucumbir cuando la de Jorge comienza a estallar lefa por todos lados y la De Héctor se comienza a correr también sobre su cara. Yo, de ver la escena, me empalmo más y más y suelto toda la lefa dentro de su boca. Los tres sofocados del calor y del orgasmo nos fundimos en un beso.


  • Sí que está bien esta cala.- digo entre risas.

  • Solo nos falta un piti, condones y ya.- dice Jorge.

  • Para la próxima, ja, ja, ja.


Nos lanzamos de nuevo al mar y tras alcanzar la orilla Jorge se va dando un paseo por la orilla y yo me quedo con Héctor en la toalla.


  • ¿Qué te parece?.- le pregunto.

  • Muy majo, además de comerla de vicio.

  • ¿Mejor que yo?

  • No, te lo prometo.

  • Le invito luego a casa, ¿te apetece?

  • Uhmmm, no sé, noche de sexo con dos tíos buenos...


Le hago cosquillas y se sale de la toalla poniéndose de arena hasta los huevos.


  • Ja, ja, ja, pues, claro.

  • Eres un cielo.

  • Tú más, anda, déjame que me voy a dar un baño.

  • Jooo.

  • Vuelvo en nada.


Aplaudo y se echa a reír. Le veo yéndose hacia la orilla y suelto una gran sonrisa a la vez que siento un pinchazo en el pecho.


La tarde continua entre agua salada, fruta y risas. Se comienza a fraguar algo bonito entre los tres y después de las mamadas en la calita se nota que estamos deseando algo más.


Recogemos y nos vamos a mi casa. Entramos y tras soltar todo nos vamos los tres a la ducha. Todos mojados y con el rabo tieso vamos saliendo de la ducha.


  • Chicos ir a mi cuarto, ahora voy yo.

  • Valeee...-dicen los dos entre risas y agarrando el rabo del otro.


Busco mi pera anal y me hago una limpieza. No estaba muy sucio, pero por si acaso, además esta noche quiero que me dejen el culo bien abierto. Tiro de la cisterna y abro la puerta del baño que chirría de una manera un poco escandalosa. Entro al cuarto y me encuentro a los dos sobre mi cama de a cuatro patas con el culo en pompa y comiéndose la boca.


  • Joder, esto sí que son buenas vistas.- me acerco a ellos y les doy con el rabo a cada uno.


Les miro y se los acaricio. Meto la boca en uno de ellos mientras con una mano me trabajo el otro. Voy intercalando hasta que no aguanto más y busco un condón. Me lo pongo y les doy una palmada a ambos en el culo.


  • Pinto pintó gorgorito, saca la mano que yo no he sido, uno, dos y tres. A ti.


Jorge es el elegido. Héctor se pone abierto de piernas delante de Jorge y agarrándosela se la ofrece. Yo apunto con mi rabo que me cuesta hasta bajarlo de lo dura que la tengo y apretando un poco entra. Voy despacio hasta que siento que la tengo toda dentro. Le agarro de las caderas y le embisto con fuerza mientras él gime con la polla de Héctor en la boca. Héctor me mira y sonríe complacido.


Ahora Héctor está sobre mí cabalgándome y le estoy comiendo el culo y los huevos a Jorge. Siento las manos de Héctor acariciándome y los pelillos de los huevos de Jorge haciéndome cosquillas en la punta de la nariz. Jorge tiene el culo bien abierto y se lo como con ganas, muchas ganas. Me meto sus huevos en la boca y buscando su polla le masturbo.


Me pongo a cuatro patas a comerle la polla a Héctor y Jorge poniéndose detrás me la hinca sin pensárselo. Me ha dolido un poco, pero teniendo la maravilla de polla de Héctor se me pasa enseguida. Jorge la saca del todo y me la mete rápidamente, haciéndome soltar precum y perder un poco la cabeza.


Jorge me embiste con fuerza y su polla ya entra y sale sola. Yo encima de el bajo un poco y lo comienzo a cabalgar. Héctor está de pie mientras le como la polla.


  • Héctor métemela tú también.

  • ¿En serio?

  • Nunca he hablado ahhhh... tan en serio...


Me echo para delante y Héctor se pone detrás. Encauza su polla hacia mi interior y noto la presión cuando entra. Solo se mueve Héctor, Jorge tiene poca maniobra. Estoy flipando del gustazo que es el tener dos pollas en el culo. Oigo a Héctor gritar mientras siento su lefa caliente cayendo sobre mi espalda. Se aparta hacia un lado y ahora Jorge coge velocidad dejándome el culo irritado. Me besa y gime mientras se corre dentro del condón, pero dentro de mí. Sin sacarla me pongo hacia atrás a masturbarme hasta que consigo soltar toda la lefa que llevo dentro. Héctor viene hacia ella y se la mete en la boca. Siento la polla de Jorge muy dentro de mí, creo que hasta le cabrían los huevos.


Sudorosos y satisfechos nos levantamos con temblor de piernas y nos damos una ducha.


  • ¿Os apetece un baño en la piscina?.- les pregunto.

  • Vale y después ya me voy a casa.- dice Jorge.

  • Jooo.- le dice Héctor dándole un beso en la mejilla.

  • Bueno tal vez...

  • Yo si quieres cuando me suene el despertador te despierto y te vas.

  • Buena idea.


Nos vamos los tres a la piscina y tras un peta, unos baños y unas risas nos vamos de nuevo a casa. Cambiamos las sabanas y caemos los tres como losas. Yo en el medio y cada uno a un lado abrazándome me dormí como el hombre más feliz del mundo.









PeCtOrAlEs