30.6.20

Relato. Nudismo 1ª parte.

Cada año estoy deseando que comiencen los días de calor, aunque no me puedo quejar de clima en Valencia siempre hace buen tiempo casi todo el año, pero cuando uno deja de ir a la playa y tiene que ponerse la calefacción en casa ponerse algo que te tape hasta el cuello, ahí es cuando uno está contando los días para volver a la playa.

Era Junio, a veces voy con amigos o familia, pero reconozco que lo que más me gusta es ir solo.

Valencia lo bueno que tiene, además de su buen clima, sus paellas, almuerzos, cultura, etc., dispone de un montón de costa donde perderte en sus playas es muy fácil, de normal voy a una que está cerca del puerto, si te pones andar llegas casi hasta Cullera. 

Llegue sobre las once y hacia un día de lujo, era viernes y había gente, estarían todos como yo, deseando sol. Coloque mi sombrilla, la toalla, me puse crema y me tumbe a leer, es una de las cosas que más disfruto de la playa, la lectura, me puedo tirar horas y horas y ni me entero, leer y bañarse lo mejor de venir a la playa.

Así se me pasaron las horas, me levanté al rato y cogí la mochila con mis cosas, deje el resto y me fui a pasear por la orilla, el agua aún estaba fresca, el mar en calma, precioso, deseoso de sentir el sol en su manto. 

Me sentía súper relajado y sereno, cuando miro para el frente y venia hacia mí un chico de mi edad, totalmente desnudo y con una sonrisa espectacular, no sabía dónde meterme, si me daba la vuelta mal y si continuaba el paso, no podía dejar de mirar su entrepierna, como su rabo se mecía de lado a lado y esos testículos me incitaban a tocarlos y morderlos, intente salir de ese bucle y continúe caminando, no sabía dónde mirar y lo mire, en ese momento el me miraba y sonrió, casi me tropiezo conmigo mismo y me dejo la barbilla en la orilla, él se acercó y me sostuvo y yo de la vergüenza casi me da una parada cardíaca 


. Vaya, casi te comes la arena a bocados, jajajaja 

. Yaaaa, sí, soy un poco torpe conmigo mismo, jajajaja 

. ¿Estas bien? 

. Sí si, mejor que nunca. -Y me puse como un tomate enserio. 

. Me alegra oír eso, ¿venias a la playa o solo estabas de paseo? 

. De paseo, estoy más cerca del puerto,- mi cara debía ser un poema de colorada, ¡mierda¡- 

. Vaya, que pena, - me dijo con cara de corderito degollado.

. Puedo ir a por mis cosas o venirte tú, no sé si me sentiría muy a gusto en esta zona. 

. ¿Y eso, porque? 

. No sé, supongo que será por mi cuerpo y el del resto, es algo como que veo muy privado, será por la educación o que nunca lo he pensado.

. Tal vez, ¿te gustaría venirte y probar? No hace falta que te desnudes. 

. Voy a seguir paseando hacia mis cosas y me lo pienso, ¿te importa? 

. Para nada, ves esa sombrilla verde y morada a rayas, y abajo una mochila azul, pues si te animas, allí te espero, por cierto, me llamo Jorge.

. Raúl, encantado, te veo ahora.

. ¡¡¡Y sin pensártelo¡¡¡¡ 

. Jajajaja, ahora te veo .

. Hasta ahora.- Y me volvió a mostrar una sonrisa maravillosa. 


No recuerdo muy bien la vuelta a la toalla, si antes iba de lo más tranquilo y relajado del mundo, volví como si me hubieran sacado el estómago por la boca y me lo hicieran tragar de nuevo, me senté en la orilla y me puse a recapacitar, era un chico muy simpático, lanzado, guapo, con un buen rabo y con unos testículos que no me quitaba de la cabeza, tenía miedo, literalmente, cogí aire lo expulse poco a poco y me fui a la toalla, recogí mis cosas y me arme de valor. 


Allí estaba, rodeado de gente en pelotas y en dirección a un chico desconocido, planteándome por primera vez el desnudo en un espacio abierto, supongo que las cosas se te ponen delante para que te atrevas a salir de tu zona de confort, y hoy era un día perfecto para ello. 


. Hola, ¿Qué tal? - le dije tímidamente.

. Hola guapo, ahora mejor, bienvenido a la zona de la playa donde no existe el pudor y se acepta a la gente tal y como es.

. ¡¡¡¡Estoy muy nervioso¡¡¡¡ 

. Bueno eso es normal, ven ponte aquí a mi lado, tu ponte cómodo y estate como te apetezca. 

. Gracias 


Y allí me instalé, toalla con toalla, puse mi sombrilla también y así teníamos mas sombra, porque pegaba con gusto, me senté en la toalla y me puse hacerme un cigarro. 


. Se me olvido el mío en casa. 

. Te hago uno, ¿vienes aquí de normal? 

. A esta y a otras, todas nudistas, no me siento cómodo ya en la de textil, aunque te parezca raro, comencé a venir a estas playas hará unos dos años, antes de venir me gustaba estar en casa en bolas y en el gimnasio nunca he tenido pudor, algo normal.

. Bueno, normal soy yo, tu estas unos niveles muy superiores.

. ¡¡¡Qué va¡¡¡ eso no es verdad, eso depende de cómo te mires y como te sientas, no todo está en el exterior, además lo mismo que tengo yo lo tienen todos los hombres. 

. Pero no igual, reconócelo.

. Haber igual está claro que no, porque igual que tenemos unas facciones diferentes, cada uno tenemos un cuerpo distinto porque lo que a ti te puede parecer feo a mí a lo mejor me encanta. 

. Es verdad.

. Tampoco quiero que me des la razón, solo que seas capaz de apreciar lo que tienes.

. Es posible que me deje llevar por las vistas, tanta carne expuesta y mis miedos.

. Ya, eso es normal, ¿te sientes incomodo? 

. Si te digo que no te miento, tampoco es un si completo, no se explicarlo. 

. Con tus palabras, jajajaja 

. Haber, te lo suelto como lo siento y ya, antes de conocerte lo único que no podía dejar de mirarte era tu zona …. 

. ¿Mi polla? 

. Si, y también te mirado la sonrisa, tus ojos y todo vamos, pero como que al ver eso tan, así al natural, mi cabeza se va por otros lados. 

. ¿Sexualmente hablando? 

. Si 

. Es normal, si al final te sientes cómodo y decides practicarlo, veras que al principio te costará, y habrá más de una vez que no saldrás del agua o no te levantaras de la toalla por la empalmada que llevas, pero contra más naturalidad le des y no lo veas como algo obsceno o sexual mejor.

. Me costaría, pero supongo que todo se puede, ahora mismo estoy bastante empalmado.

 

Y así, sin pensárselo me puso la mano en el paquete, le mire a los ojos con vergüenza y me sonrió, me fije que él se estaba empalmando y me pareció hermosa, me hubiera puesto a mamársela ahí sin pensármelo, pero no era plan, metió su mano por debajo de mi bañador y me la sujeto, se acercó más a mí y con su mano libre cogió mi mano y me la llevo a su rabo, no podía parar de mirar para todos lados, muy normal no era la situación, en realidad nadie nos miraba, y estábamos a una distancia de la gente bastante considerable, de repente saco su mano, me beso, y se puso boca abajo, le seguí.

Los dos tumbados boca abajo, empalmados y mirándonos a los ojos con ganas de actuar, de hablar, de saber, pero nos mantuvimos tranquilos, solo observándonos, contemplándonos.


Se estaba genial, bajo la sombrilla, sintiendo el sol en las piernas, la suave brisa, estábamos de lado uno enfrente del otro, el abrió sus ojos y me miro, saco su mejor sonrisa y volvió a cerrar los ojos, como de vergüenza, yo aún seguía empalmado y pude notar que el también, sin pensármelo me baje el bañador, me acerque más a él junte nuestros rabos y me escondí en su pecho. 



PeCtOrAlEs