15.3.21

Relato. Como conocí a Robert.


Como conocí a Robert.

Eran las cinco de la tarde de un miércoles de Agosto en una playa nudista, llevaba horas bajo el  paravientos, pues el calor era sofocante, decidí ir a darme el octavo baño cuando al volver muy cerca mía se había colocado un chico.


Reconozco que lo primero que le mire fue ese pene caído hacia delante y esos huevos tan apetecibles. A continuación le mire a la cara y me estaba mirando, me gire hacia el mar y respire hondo. Soy malísimo para ligar y menos en esas circunstancias, además tampoco sabia si el chico era gay o no, me metí un poco hasta que el agua envolvió mis genitales y me di la vuelta. Como a dos metros de distancia se encontraba el chaval mojándose las manos y humedeciéndose el pelo.

- Hola.
- Hola.
- Esta caliente el agua.- me dijo.
- Bastante, con el calor que esta haciendo hoy.
- Ya, por eso he venido a estas horas, ¿llevas mucho por aquí?
- Un par de horas.
- No te ha dado mucho el sol.
- Dentro del paravientos en los pies, jajaja.

Se acerco a mi y me sonrió, yo le devolví la sonrisa y me acerque mas aun. Lo tenia a medio metro, las olas nos golpeaban los muslos y nuestros penes brincaban de lado a lado.

- ¿Eres de aquí?.- me pregunto.
- Si, ¿tu?
- Si de Barcelona capital.
- Que bien, ¿sueles venir por aquí?
- La verdad que no, suelo ir mas a las playas de textil, por que sino tengo que venir solo como hoy.
- Te entiendo, me pasa igual. Por cierto soy Jose.
- Robert, encantado.

Se acerco a mi y me dio dos besos a la vez que juntaba su pene con el mío. No se separo se quedo ahí sintiendo como nuestros rabos crecían cada vez mas.

- Tenia miedo de meterme por si había medusas pero creo que no hay ninguna, sino un gran...

Miro alrededor y aunque estaba la playa con gente metió la mano debajo de nuestros huevos. Los manoseo un poco y yo ya descapullando le mire y le dije.

- ¿Nadamos un poco?
- Claro.- me contesto llevándose la mano que acababa de retirar a la nariz.
- Vamos.
- Entre el olor a sal y de tus huevos, nunca me había olido tan bien la mano.

Le mire descojonado de la risa y me tire al agua, bucee un poco y saque la cabeza, mire y se encontraba a mi lado. Nadamos hacia la boya y una vez allí nos sujetamos a ella como pudimos y con la mano libre agarramos el pene del otro.

- Aun sigues empalmado.- le dije.
- Y tu.

Nos pajeamos el uno al otro y sentimos como nos corríamos dentro del agua.

- Que desperdicio.
- Alimento para los peces, jajaja.

Volvimos a la orilla y nos sentamos para que el agua nos diera en los pies.

- Nunca había echo esto.
- Yo tampoco.- le dije.
- Soy muy lanzado pero luego me quedo en nada.
- Yo al revés soy muy tímido y luego cuando me das confianza...
- Eres muy guapo.
- Gracias, tu también.
- ¿De cara o de rabo?
- De cara, ¿por?
- Recuerdo cuando has salido del agua y me has visto que te has quedado un rato mirándome el rabo, hasta que has subido la mirada y me has mirado la cara.
- Tienes un rabo muy bonito, pero la cara también y el cuerpo.
- Yo he hecho lo mismo, jajaja. 
- Vaya dos.

Nos contamos nuestra vida y nos volvimos al agua, ya estábamos menos tensos y esta vez no hubo paja pero congeniamos muy bien.

- ¿Tienes que irte?.- me pregunto.
- No tengo prisa.
- Vente a mi casa, mis padres no están.
- Entonces nos vamos ya, jajaja.
- Te ayudo a recoger y nos vamos.

El había venido en bus y yo en coche, aparcamos por su barrio y entramos en su casa. Su barrio era muy diferente al mío, en ese se olía el dinero, solo la entrada daba sensación de entrar a un hotel. Entramos a su piso y antes de poder decir nada se lanzo a mis labios.

- Estaba deseando llegar.
- Y yo.

Me agarro de la mano y me llevo a su cuarto, cerro la puerta y se desnudo, vino hacia mi y pegando su cuerpo al mío me beso el cuello y me acaricio la espalda.

Nos tiramos a la cama y seguidamente se engancho a mi rabo, la mamaba con ansiedad, me bajaba el prepucio con poca delicadeza y me apretaba los huevos.

- Robert.
- Si.
- Me haces daño.

Se la saco de la boca y dejo de apretarme los huevos, se retiro y se sentó al borde de la cama.

- Lo siento.
- Lo se, ven aquí.
- Soy muy bruto no se controlarme cuando...
- Ven...

Se tumbo a mi lado y le acaricie la cara.

- ¿Es tu primera vez?
- Si.- me dijo escondiendo la cara entre sus manos.
- Yo no es que tenga mucha experiencia pero podemos hablarlo.
- Siempre he pensado que pasaría el día que estuviera con alguien por primera vez.
- Ven.

Me senté sobre la cama y le rodee con las piernas estando el sentado también.


Le bese.

- Cuéntame que cosas soñabas.
- Pues algo así, estar con alguien, sentirlo.
- Que mas.
- Besarlo, acariciarlo.
- Que mas.
- No se, pues...eso...chupársela, que me la chupen...
- Hay mas cosas.
- Si lo se.
- Cuando te he visto en la playa y después has venido hacia mi y nos hemos masturbado en la boya, pensaba en mil cosas.
- ¿Cómo cuales?
- Besarte y lamerte todas las zonas de tu cuerpo.
- ¿Todas?
- Si todas.
- Túmbate boca abajo por favor..- le pedí.

Se tumbo y me coloque a su lado de rodillas. Acerque mis labios a su cabeza y se la bese, continúe bajando y le bese los hombros, los brazos y las manos, volví a su cuello y comencé a bajar dándole besos, me quede en donde comienza la raja del culo y con las manos se lo apreté y sobe, mientras con la lengua iba metiéndome entre ella. Le pedí que abriera las piernas y poniéndome detrás le agarre con las dos manos el culo y abriéndoselo bien le volví a lamer desde el ano hasta la nuca.

- Ufffff que gusto....

Volví con mi lengua hasta su ano y me quede allí saboreándolo, haciendo círculos alrededor de el, comenzó a gemir y ha moverse, le intente sacar el rabo y subiendo un poco el las caderas lo conseguí, no era como el mío que cuando se pone duro no hay quien lo baje, su polla era mas flexible e igual de dura. Le baje el prepucio y le lamí desde la punta del glande hasta el ano, pasando por sus huevos y el perineo.
Sus gemidos fueron en aumento. Cada vez le comía el culo, los huevos y el rabo con mas destreza, de la punta de la polla le caían gotas de mi saliva mezclada con su precum.

Para seros sinceros era la primera vez que le comía el culo a alguien, y por lo que gemía Robert, mal no lo debía de estar haciendo.

Continúe disfrutando de aquello que me estaba volviendo loco, hasta que salí de allí y baje por sus piernas besándoselas, hasta llegar a sus pies. Le lamí el talón y después la planta. El gemía y se rozaba con el rabo entre las sabanas.

- Date la vuelta.

Se giro y su rabo bien duro y tieso miraba hacia el techo de su cuarto. Subí hasta su cara y tras besarlo le pregunte.

- ¿Bien?
- Mejor aun.

Le volví a besar en los labios y volví a besarlo por todo el cuerpo, menos los genitales. Cuando llegue a sus pies me metí un dedo gordo en la boca y se lo mame, el que tenia las manos bajo su cabeza las saco y se comenzó a masturbar. Yo continúe comiéndole los pies mientras el se pajeaba lentamente. Pare y subiendo por sus piernas me metí sus huevos en la boca y los deguste, subí y quitando la mano me dejo vía libre. Se la sujete bien fuerte bajándole bien el prepucio y le mire.

- Vaya, mejor de lo que me imagine en la playa.
- ¿Te gusta?
- Mucho.

Y me la metí en la boca, se la mame soltando cada vez mas saliva y notaba como mi rabo cada vez goteaba mas, me la agarre y mientras le hacia la mamada me masturbe.

- Si continuas así voy a correrme...
- ¿Quieres?
- Siiiii......

Mientras me decía eso comenzó a salir leche y a la segunda lefada me enganche a su polla y el intentando que se la soltara de lo sensible que la tenia.

- Joder.....para....

Me porte bien y la saque de mi boca, aun con ella en la mano fui a donde cayeron las primeras lefadas y las lamí. Se retorcía de gusto y hasta cogió la almohada para llevársela a la cara. Se la solté y me tumbe a su lado.

- Madre mía...
- ¿Te ha gustado?
- ¿Qué si me ha gustado?, ha sido una pasada, joder que lengua tienes..me has comido los pies...
- Tienes unos pies muy bonitos y un poco salados, jajaja.
- Y esa comida de culo, nunca pensé que fuera tan....
- ¿Placentero?
- Eso.
- Me alegro. 
- Bueno ahora....
- Uhm....

Se tumbo sobre mi y me beso.

- Si algo no te gusta o algo dímelo, ¿vale?
- Claro.

No todo el mundo es igual, y lo mas importante es que cada uno vaya cogiendo sus gustos y su manera de hacer las cosas, y en el sexo igual, Robert se notaba que lo hacia con miedo, pero se lo curro. Me beso por todo el cuerpo y se engancho a mi rabo enseguida, esa vez no me la comió como la anterior, menos mal. Le levante las piernas y le ofrecí mi culo, directamente se metió de lleno a comérmelo y aunque lo disfrute mucho, no esperaba que fuera así. Saco la cara y me miro.

- ¿No te gusta?
- Si si...

Me bajo las piernas y se tumbo a un lado.

- Robert.
- Déjame.
- Que tienes tres años.

Se dio la vuelta sin mirarme.

- Mírame.
- Hola.
- Hola.
- ¿Qué hago mal?
- Mal no, solo que me siento solo una polla y un agujero del culo.
- ¿Por?
- Esta bien que me comas eso y lo estabas haciendo de puta madre, pero juega conmigo, acaríciame, bésame, que no sienta que solo me están comiendo el culo y la polla y poco mas.
- Lo siento.
- Gracias, bueno será mejor que me vaya.
- ¡No por favor quédate¡

Me levante y me quede allí de pie, el vino por detrás y me abrazo.

- ¡No te vayas¡

Se puso a llorar y a continuación yo, me gire y nos abrazamos gimoteando y dándonos besos húmedos.

MEDIA HORA MAS TARDE.

Tras expulsarlo todo, menos mi lefa, nos duchamos y volvimos al cuarto, después de coger varias cosas de la cocina.

- ¿A que hora llegan tus padres?.- le pregunte.
- Mi madre sobre las diez y media y mi padre llegara mañana.
- ¿A que se dedican?
- Mi madre enfermera y mi padre piloto.
- Que guay.
- Si, supongo. ¿Y los tuyos?
- Mi madre es dependienta y mi padre fontanero.
- Bien diferentes todos.
- La verdad que si.

Guarreamos un poco de comida y bebida y nos fumamos un cigarrillo en el balcón. Entramos y me pidió que me tumbara boca arriba. Me desnudo y luego el, me beso y se coloco a mis pies.

- Gracias.- me dijo.

Me junto los pies y me los beso, después me lamio la planta y después me chupo cada dedo, mi polla se comenzó a empalmar y la deje descapullándose poco a poco. Esta vez además de comerme los pies me acariciaba las piernas, el pie que no me comía, y me miraba y sonreía.

Estaba comiéndome los pies cuando me salió un gemido y el mirándome sonrió aun mas. Me los beso y continuo subiendo hasta mi ingle donde la lamio y beso sin rozarme nada mas, paso sobre mis genitales y me chupo el vientre y fue hacia mis pezones donde se quedo un buen rato que agradecí. Mientras sus manos me acariciaban el pelo, la cara, etc.

Estiro un brazo y agarrándome la polla me la comenzó a masturbar mientras seguía enganchado mamando uno de mis pezones. Me dejo al descubierto el glande y sin dudarlo bajo besándome hasta metérsela de lleno en la boca. 
Sus manos, su lengua y sus labios iban de allí para acá recorriendo todo lo que le daba de alcance.
Yo gemía y gemía y cada vez sentía mas presión en los huevos.

- Quiero correrme.

Me masturbo con mas energía mientras con la boca me lamia la punta, hasta que convulsione de placer y antes de que la leche saliera el ya se la había metido en el boca. Me gire, me estire, aun seguía corriéndome dentro de su boca y la sensación era de lo mas gustosa. No se la saco de la boca hasta varios minutos después que babeando por la comisura de sus labios me miro.

- ¿Bien?
- Anda ven aquí.

Subió hasta mi y lo bese con fuerza, se entrelazo a mi y no dejamos de besarnos hasta que sonó la alarma para avisarnos que eran las diez.



 

PeCtOrAlEs